
Un compromiso con los que menos tienen que llevamos a cabo junto a la Fundación La Caixa y a las empresas líderes del sector agroalimentario reunidas en la asociación Landaluz. Han sido años muy gratificantes en lo que hemos comprobado, a través de un ejército de voluntarios y entidades colaboradoras, la vocación solidaria de los andaluces, de un pueblo que sabe muy bien cómo crecemos y nos superamos cada día ayudando a los demás, sobre todo a los que ni siquiera tienen cubiertas sus necesidades básicas. Lo hemos podido vivir de forma especialmente intensa durante la pandemia, cuando la ola de solidaridad que promueve Andaluces Compartiendo desbordó todas las previsiones y nuestro trabajo fue más necesario que nunca.
Y continúa siéndolo ahora en estos tiempos tan complejos, por eso seguimos trabajando sin descanso en la recogida y reparto de alimentos básicos, pero tenemos que estar muy orgullosos del camino recorrido: hemos podido ayudar a más de 30.000 familias andaluzas en estado de necesidad.
Desde la sociedad civil y el sector privado, hemos levantado una auténtica plataforma solidaria, una alianza por la solidaridad en favor de los segmentos sociales más desfavorecidos de nuestra tierra. Pero debemos seguir avanzando mientras existan tantos desequilibrios. Esta red solidaria de empresas donantes, colaboradores, voluntarios y embajadores todavía puede ampliarse mucho más para que cada vez seamos más Andaluces Compartiendo.