El objetivo, poner el foco en Andalucía y lanzar una mirada distinta en pleno debate territorial y del modelo de financiación.
Como suele decirse, hoy es una de esas fechas señaladas en el calendario. Cualquier país tiene el derecho, y yo diría casi que la obligación, de preservar su memoria, porque es un ejercicio absolutamente necesario para evaluar el camino recorrido.
Sin duda el 4 de diciembre de hace justo 40 años se inició un camino que ha resultado trascendental para la historia de Andalucía, y creo no equivocarme, para el conjunto de España.
Así es porque Andalucía no sólo es el territorio donde viven más españoles, sino también una parte fundamental del ser y el sentir de nuestro país.
Un país que hace 40 años, cuando se produjeron aquellas movilizaciones que hoy conmemoramos, corría el riesgo de perpetuar una fractura entre un norte desarrollado y un sur que siguiera en el abandono al había estado sometido en las últimas décadas, o incluso siglos anteriores.
Como economista que soy, permítanme que les diga que este abandono secular no es una opinión, sino una constatación del atraso que venía acumulando en nuestra tierra desde mucho tiempo atrás, perceptible en muchos ámbitos, desde las infraestructuras hasta la propia configuración del mercado de trabajo, que era propio, y no es agradable decirlo, de una región subdesarrollada.
Celebrar el comienzo de ese camino de recuperación es, por tanto, algo importante, y para Cajasol está siendo un auténtico honor colaborar con la Cadena SER en estos encuentros que han reunido ya a los dirigentes de los principales partidos andaluces, desde Izquierda Unida al PP, pasando por Podemos.
Como saben, dentro de unos días contaremos con los máximos representantes de Ciudadanos, un encuentro que no pudo celebrarse en su momento, digamos por razones de agenda aunque me temo que la razón más bien fue la convulsa agenda política de nuestro país en los últimos meses.
En todo caso, la importancia de hoy no sólo la marca el calendario sino la presencia de tres personas muy vinculadas a esta efeméride.
Digo tres porque la moderadora de hoy no es una moderadora cualquiera sino de una persona que contribuyó, junto a otros muchos periodistas, a que la voz de Andalucía se oyera. Aquel “Andalucía es una tierra hermosa, vieja y sabia. Siéntase orgulloso de ser andaluz”, forma parte, sin duda, de lo mejor de nuestra memoria sentimental.
Un placer y un auténtico lujo contar contigo hoy aquí, María Esperanza.
Estuviste entonces en primera línea informativa, y en primerísima línea política estuvo sin duda Rafael Escuredo, que poco después se convertiría en Presidente de la Junta de Andalucía.
Rafael es un testigo de excepción de aquel tiempo porque fue la persona encargada de liderar un proceso que culminó en otra fecha simbólica, quizá la más simbólica de Andalucía, el 28 de febrero.
Finalmente, está claro que la persona que hoy cuenta con más responsabilidad política en nuestra tierra es la Presidenta de la Junta de Andalucía, doña Susana Díaz.
Además de esa alta responsabilidad, todo el mundo sabe que Susana Díaz tiene voz y criterio propio y que desde luego los expresa con claridad y a menudo con contundencia.
En fin, perdónenme la licencia taurina, pero reunimos hoy en Cajasol un auténtico cartel de lujo.
Un cartel de lujo para la prensa que nos acompaña, a la que doy como siempre la bienvenida, y por supuesto para todo este público que abarrota Cajasol y que nos honra con su presencia.
Seguro que va a ser este un programa de gran repercusión y gran audiencia en la Cadena SER a la que, antes de terminar, quiero felicitar por esta iniciativa, un rotundo éxito que es un honor para Cajasol acoger en nuestra casa.
Muchas Gracias.