Como ya saben, en esto meses tan convulsos que hemos vivido desde la pandemia, en ningún momento la Fundación Cajasol ha parado su actividad, pero es una realidad que muchas de las iniciativas y proyectos habituales se han visto afectados por el devenir de las circunstancias.
Los Jueves Flamencos se volvieron a programar de la mano de Manuel Lombo y su equipo de Musicaemoción a principios de año y, aunque tuvimos que modificar y cambiar fechas, pudimos sacar adelante un ciclo de nivel y gran calidad.
Ahora, con la normalidad ya asentada, podemos volver a disfrutar de este programa de espectáculos hasta el próximo mes de diciembre.
Un total de cinco conciertos que darán comienzo el próximo 6 de octubre de una forma muy especial.
Dorantes, al que agradezco enormemente que nos haya acompañado hoy, ha elegido nuestro teatro y este ciclo para grabar lo que será el concierto acústico de su nuevo disco. No solo tenemos el privilegio de que una figura como él abra la nueva temporada de nuestros Jueves Flamencos, sino que, además, hará de esto algo que quedará para la historia.
Gracias Dorantes, por tu generosidad y por tu siempre buena disposición. Es una realidad que ya eres uno más de esta casa y para nosotros es un verdadero placer disfrutar de tu arte siempre.
El ciclo continúa con el cante y la guitarra de Sandra Carrasco y David de Arahal, el baile de Luisa Palicio y Borja Cortés, el cante de David Palomar, y, por último, un homenaje a Manolo Marín, imagen del cartel de este año. Una imagen, por cierto, cuya historia y “conexiones” ha explicado Manuel Lombo y creo que son, cuanto menos, curiosas.
En este último espectáculo, el 1 de diciembre, artistas como Rafael Campallo, Manuel Betanzos, José Luis Vidal “El Lebri”, Juan José Jaén “El Junco” y Marco Vargas, le rendirán a este referente en el mundo del baile.
Quiero volver a agradecer a Manuel Lombo y a su equipo por el trabajo y el esfuerzo que han dedicado en la puesta en marcha de este nuevo cartel.
Desde los inicios de este ciclo nuestro criterio de programación viene marcado fundamentalmente por la calidad y variedad de los espectáculos… se trata de un ciclo que ya tiene su sello propio en la ciudad, uno de lo más longevos de nuestra programación cultural y al que, déjenme decirle, le tengo un especial cariño. Al ciclo y al que fue su coordinador, Manuel Herrera.
Termino estas líneas remarcando nuestro compromiso con la cultura y las tradiciones, siendo, sin dudas, el flamenco una de las más importantes. Por nuestro escenario han pasado promesas del cante, del baile y del toque que, hoy en día, son ya grandes figuras. Es un placer, una temporada más, volver a abrir nuestro teatro para el flamenco en su estado más puro.