El objetivo de estas jornadas es mostrarles a los participantes algo que hasta ahora solo podía haber intuido en alguna serie de Netflix. Acercarles al ámbito de la consultoría política desde su praxis, con ponencias que muestran las diferentes realidades vividas en una campaña y que solo tienen una cosa en común, quienes toman la palabra son consultores políticos.
Han participado, y en muchos casos dirigido campañas electorales de las de verdad. Conocen de primera mano el oficio de ganar elecciones y han experimentado el arte y el aprendizaje que surge de perderlas.
Diputados, senadores, representantes políticos
Estimado César,
Queridos amigos,
Apenas unas breves palabras pada darles a todos la bienvenida y para mostrarles mi sincera satisfacción por colaborar en unas jornadas tan interesantes y tan oportunas como estas.
Interesantes desde su irónica formulación, contraponiendo el oficio de ganar con el arte del perder. Sin duda hay ironía pero déjenme que les diga que creo que también hay un buen fondo de realidad, porque lo fácil es sobrevivir en política ganando elecciones mientras que para hacerlo perdiendo, pues en efecto, hay que tener bastante arte. Y en un país como el nuestro con tanta creatividad, ejemplos tenemos para todos los gustos.
En todo caso, muchas veces hemos visto que en política, de una buena derrota se aprende y en muchas ocasiones se convierte en antesala de la victoria. Y sensu contrario, también una victoria mal digerida a menudo arrastra a los políticos al fracaso antes de lo que se pensaba,
En todo caso, creo que la mayoría de los que intervienen en estas jornadas coincidirán conmigo en que en política –y yo diría que en la vida—victoria y derrota son dos caras de una misma moneda que, por una simple cuestión estadística, no siempre cae del mismo lado.
En efecto, si alguna virtud tienen estas jornadas, y creo que tienen muchas, es que quienes intervienen en ella conocen bien, yo diría que algunos muy bien, los entresijos de la estrategia política, que va mucho más allá de la mera campaña electoral.
En mi opinión, las campañas influyen en la misma medida que solemos decir que el tamaño importa, aunque creo que la política es un esfuerzo de largo aliento y exige coherencia, congruencia, experiencia y sin duda un poco de paciencia para llevarla a buen puerto.
César, creo que es un gran acierto haber juntado tanto de todas esas virtudes en esta jornada en la que la Fundación Cajasol tiene, como les decía al principio, el orgullo de participar.
Por dos motivos básicamente. Uno, sin duda, por la competencia técnica y acreditada por consultores de distintas generaciones, desde Nacho Varela a Angela Paloma, por citar sólo a dos de ellos.
Y en segundo lugar también participan representantes de grupos políticos que reflejan la pluralidad de nuestra sociedad y creo tal como se han puesto las cosas en nuestro país, ningún espacio de diálogo debe ser desaprovechado y estoy seguro que éste tampoco lo va a ser.
Termino con una pequeña maldad, que estoy seguro que me disculparán pero es que en su momento me llamó mucho la atención y tuvo que ver con la victoria de Barack Obama en 2008. Al menos que yo recuerde, fue la primera que su speechwriter de cabecera, el hombre que escribía sus discursos, alcanzaba semejante notoriedad.
Se llamaba y se llama Jon Favreau y a mí me llamó mucho la atención que se popularizara su nombre, cosa que hasta esa fecha no había ocurrido, al menos para el gran público y que, además, se atribuyera buena parte del éxito de Obama a este consultor. Supongo que con razón.
Pero lo que más me llamó la atención es que dos años después, cuando el primer presidente negro de EEUU recibió un fuerte castigo electoral en las legislativas de 2010, nadie habló de ningún consultor, nadie culpó de la derrota a ningún escribidor de discursos, ni a ningún estratega en la sombra.
Simplemente lo dejo como reflexión de que tal vez, sólo tal vez, eso de que el éxito tiene muchos padres y madres mientras que la derrota es huérfana, no sólo les pasa a los políticos sino también a quienes les asesoran.
Es una duda que me quedó y que tal vez la abordéis en esta jornada en la que, insisto, para la Fundación Cajasol es un honor participar y colaborar.
- Jornadas ‘El oficio de ganar elecciones y el arte de perderlas’, organizadas por UC3M, Redlines y Fundación Cajasol en el Auditorio de Cecabank en Madrid.
- Jornadas ‘El oficio de ganar elecciones y el arte de perderlas’, organizadas por UC3M, Redlines y Fundación Cajasol en el Auditorio de Cecabank en Madrid.
- Jornadas ‘El oficio de ganar elecciones y el arte de perderlas’, organizadas por UC3M, Redlines y Fundación Cajasol en el Auditorio de Cecabank en Madrid.
- Jornadas ‘El oficio de ganar elecciones y el arte de perderlas’, organizadas por UC3M, Redlines y Fundación Cajasol en el Auditorio de Cecabank en Madrid.