Siempre es una alegría volver a Córdoba, tierra como saben de la que nunca puedo irme porque es la mía. Pero esta vez se ha sumado la satisfacción extra de retomar la actividad cultural en nuestra sede de la Fundación Cajasol en la ciudad.
Como hemos visto los presentes, se ha tratado de un acto atípico. Todos tenemos que adaptarnos a la nueva normalidad y contribuir a ella con nuestro esfuerzo. Es la única forma de colaborar en la reactivación progresiva de la sociedad y de la economía para superar cuanto antes los lastres que nos deja esta pandemia.
En la parte que nos toca, la nueva exposición que hemos abierto hoy en Fundación Cajasol Córdoba, la de la Obra Gráfica de nuestra colección de arte, es una buena muestra del compromiso de la Fundación Cajasol con Córdoba y con nuestra labor de protección, promoción y difusión del arte y el patrimonio histórico.
Esta vocación, como saben, está en el corazón de nuestra obra social, pero tiene hoy más sentido que nunca por el papel protagonista que ejercerá a nuestro juicio la industria cultural en el diseño de la economía del futuro.
La muestra que hoy hemos presentado, y que podrá disfrutar a partir de ahora el público cordobés, forma parte, además, del esfuerzo que estamos desarrollando especialmente en los últimos años para dar a conocer al gran público el valioso catálogo de arte de la Fundación Cajasol. Y lo estamos haciendo a través de exposiciones temáticas como esta de arte gráfico.
Esta propuesta de 44 obras nos invita a un viaje a través de casi siglo y medio de inquietudes artísticas y de experimentación a través de diferentes técnicas, desde el grabado a la serigrafía, que han llevado a innumerables creadores a acercarse al arte.
La colección que compartimos en Fundación Cajasol Córdoba desde hoy tiene lógicamente un núcleo importante de obras andaluzas, pero también reúne piezas muy significativas tanto del resto de España y como del ámbito internacional. Podrán disfrutar de obras de artistas como Miró, Chillida, Gordillo, Barceló, Tàpies, entre otros…
Además de la vertiente cultural, les recuerdo que la Fundación desarrolla otras actividades que también hemos reactivado en esta segunda fase de la desescalada y que no hemos dejado de ofrecer a la sociedad andaluza durante la cuarentena.
En este sentido y dentro de nuestras posibilidades, hemos tratado de contribuir a paliar los efectos de esta dolorosa situación en alianza con otras instituciones como el Colegio de Médicos, la Junta de Andalucía o la Plataforma Andaluza del Voluntariado.
Como ejemplo, me van a permitir que destaque nuestro servicio de atención telefónica para consultas sociales y sanitarias o el impulso a la donación de sangre. Creo que también hay que valorar el buen trabajo del Instituto de Estudios Cajasol, que ha mantenido online su labor de divulgación y formación académica enfocada al tejido productivo.
Ya para finalizar me gustaría aprovechar estas líneas para trasladar un mensaje de ánimo y de confianza en nuestra sociedad y en nuestras instituciones. Me sumo a lo que piensan que ante los restos sin precedente que se nos abren necesitamos poner el acento en lo que nos une y en los compromisos que lideramos cada cual desde su ámbito.
Termino así mis palabras agradeciendo también la tarea de los medios de comunicación, y por supuesto, deseando que nuestra Obra Gráfica les devuelva a los cordobeses la normalidad de disfrutar de una oferta cultural de primer nivel.