De este proyecto tan anhelado se beneficiarán numerosas personas que tengan problemas o dificultades de movilidad, que podrán subir al Camarín a través de la plataforma metálica.
Hace más de un año comenzábamos este camino, cuya finalidad era trabajar por una sociedad más justa e igualitaria, eliminado barreras y acabando con las desigualdades. Desigualdades que se ponen de manifiesto al tratarse de un templo con unas características arquitectónicas antiguas, pero que gracias a la buena intención e idea de la Hermandad, hemos podido remodelar y adaptar sin necesidad de perder su identidad.