Para ello, hemos contado con la presencia en este espacio y en la Fundación Cajasol de los empresarios, con los líderes de los empresarios andaluces, Javier González de Lara y Lorenzo Amor, presidentes de CEA y ATA, respectivamente, y de Rocío Blanco, consejera de Empleo de la Junta de Andalucía, en el máximo nivel de responsabilidad. Los tres nos han acompañado para ayudarnos a tomarle el pulso a la evolución del empleo y de la actividad productiva en nuestra comunidad.
A nadie se le escapa que el momento no puede ser más decisivo, con grandes puntos a favor gracias a la buena marcha de la economía andaluza y, como contrapunto, con la incertidumbre del impacto final de la guerra arancelaria que nos tiene a todos en vilo.
Las nuevas reglas comerciales decretadas por el presidente de EEUU van a tener consecuencias muy negativas para todo el mundo. Aunque también tenemos que celebrar que nuestros país y nuestra comunidad no sean, en principio, de los territorios más gravemente afectados por las nuevas tasas.
Una situación geopolítica que empaña una coyuntura y unas previsiones realmente positivas para las empresas y los autónomos de Andalucía. Todos esperamos que la vía de las negociaciones, las ayudas que ya están en marcha y las alternativas que puedan ponerse en marcha terminen por neutralizar esta posible merma socioeconómica.
Para la Fundación Cajasol, siempre es una satisfacción poder contribuir a la creación de espacios para el diálogo, sobre todo para el entendimiento y la colaboración entre el sector público y el privado, como es el caso de este nuevo encuentro. Una alianza, como siempre me gusta resaltar, que nos parece clave para que nuestra comunidad sea más competitiva y puede generar más empleo y riqueza.