Es un gran honor para la Fundación Cajasol acoger hoy una sesión plenaria del Congreso de la Asociación de Constitucionalistas, un foro clave para tomarle el pulso a nuestros derechos y libertades con importantes debates de actualidad como el impacto de las políticas de paridad o de la inteligencia artificial en la enseñanza jurídica.
Los desafíos de una sociedad democrática en estos tiempos, como vemos cada día, son realmente imperiosos y complejos, y la Constitución Española, que fue el resultado de un consenso histórico, debe seguir siendo la guía y el faro que nos marque el camino de las prioridades sociales, políticas y económicas.
Por encima de las tensiones políticas y la polaridad que vivimos, somos una sociedad y una democracia de referencia gracias a nuestra Carta Magna respaldada por la mayoría de los españoles, una sociedad que debe seguir avanzando por vía del diálogo y del debate, por muy difícil que pueda parecer esta senda en la actual coyuntura.
En la Fundación Cajasol siempre insistimos en que no existe mejor instrumento de desarrollo que la colaboración y la voluntad de sumar por encima de las diferencias, como muy bien demostramos los españoles en contextos históricos igualmente desafiantes.
La Fundación que presido, anfitriona y colaboradora de este congreso, dedica una parte de sus esfuerzos a promover espacios donde podamos dialogar, debatir y llegar a acuerdos. Así que estamos encantados de recibir a la Asociación de Constitucionalistas y que la Fundación sea hoy el punto de encuentro donde se analice el estado de nuestros principios constitucionales.